Las telas antibacterianas evitan que las bacterias, hongos y moho se extiendan por la misma. Hacen esto porque tienen compuestos químicos que matan a las bacterias que entran en contacto con la tela
Además, por su composición sintética de varias capas, nuestras telas son resistentes al uso, a las manchas y al desgaste por exposición a químicos o a los rayos UV. Eso resulta en que tengan una vida útil muy atractiva y a que sea una inversión muy conveniente para todo tipo de aplicaciones en cortinas, sábanas, manteles y más.